domingo, 25 de noviembre de 2012

Pronunciamiento


Periódico La Jornada.

A la opinión pública.

Por medio de la presente, queremos externar nuestra preocupación respecto a la forma en que se difunde información sobre casos donde están involucradas víctimas de trata de personas.

El día 22 de noviembre de 2012, el periódico La Jornada publicó la noticia del rescate de una víctima de trata de personas en La Merced (ver:  http://www.jornada.unam.mx/ultimas/2012/11/22/132839324-rescatan-a-mujer-victima-de-trata-de-personas-en-la-merced ); nota retomada por Diario Avanzada el día de hoy, 24 de noviembre (http://www.diarioavanzada.com.mx/inicio/index.php?option=com_content&view=article&id=12577:rescatan-a-mujer-victima-de-trata-de-personas-en-la-merced&catid=102:sociedad-cl-minuto&Itemid=123 ).

Los medios de comunicación tienen un papel preponderante en la construcción y formación de la opinión pública para influir en cambios sociales, culturales y políticos de un país.

La función social del periodismo radica en que las y los periodistas ejerzan la libertad de expresión, generando con ello opinión pública al tener la posibilidad real de llegar a las masas, convirtiéndose así en referentes.

La profesionalización de las y los trabajadores de los medios de comunicación, es un factor decisivo para que se consolide una conducta ética que permita a la población tener acceso a una información sustentada y que proporcione elementos suficientes para entender su realidad.

Y una faceta de nuestra realidad, lamentablemente, es la Trata de Personas, flagelo que ha azotado a la humanidad desde hace cientos de años, y afortunadamente ahora visibilizado, analizado y observado por diversos tratados internacionales y legislaciones nacionales.

Sin embargo, es muy importante tener en cuenta que la consumación de este delito no sólo tiene consecuencias inmediatas y determinantes en la víctima de trata de personas cuando se encuentra esclavizada (se trate de explotación sexual, laboral o matrimonio servil); sino que, también, por la forma y mecanismos utilizados por los tratantes, al mismo tiempo se encuentra en riesgo la integridad física e incluso la vida de las personas más cercanas a la víctima (familiares, amigos y amigas cercanas, etc.).

Si bien la dinámica de los medios de comunicación sigue una pauta de inmediatez, respondiendo a coyunturas, buscando incidir en la agenda de políticas públicas y de las y los gobernantes, resulta de vital importancia tener en cuenta dos puntos: es muy delicado informar y sensibilizar sin concluir el proceso, pues de esta forma se vuelve a invisibilizar; y, en aras de las protección íntegra de los derechos humanos de las víctimas, se debe evitar situarla en una posición de vulnerabilidad que resulte en su re-victimización.

En el documento “Medios de comunicación y Trata Sexual de Mujeres y Niñas”, publicado por el Centro de Estudios e Investigación en Desarrollo y Asistencia Social, A.C. (CEIDAS), en coordinación con el Fondo de Población de las Naciones Unidas en México (UNFPA), Género y Desarrollo, A.C. (GENDES), Centro de Estudios Sociales y Culturales Antonio de Montesinos, A.C. (CAM) y el Observatorio contra la Trata de Personas con Fines de Explotación Sexual; se sugieren diversas acciones para un ejercicio periodístico especializado en Trata de Personas, que respete y proteja sus derechos humanos.  

Entre dichas acciones, destaca la siguiente:

“…
2. Proteger la identidad de las víctimas y su paradero: al grabar o fotografías a una víctima se debe resguardar su identidad, para ello se recomienda optar por un plano de espaldas, difuminar o desenfocar el rostro, alterar la voz electrónicamente, subtitular su testimonio o hacer locución en off. Se propone no publicar los nombres reales o la ubicación de la víctima porque puede poner en riesgo su vida.

…”

La labor periodística no sólo debe cumplir con la función de informar a la sociedad y proporcionar elementos para decisión y análisis, sino que, por encima de ello, debe evitar propiciar situaciones que pongan en riesgo la dignidad humana y la vida misma de cualquier persona.

Por ello, se hace este llamamiento a todos los medios de comunicación, para que en su diario quehacer de labor informativa, no pierdan de vista la ética profesional y respeto irrestricto de los Derechos Humanos de las personas, elementos que necesariamente deben estar presentes al momento de difundir cualquier información, principalmente cuando ésta se encuentra relacionada con la trata de personas.

Atentamente,

Rosi Orozco
Ex – Diputada Federal, Presidenta de la Comisión Unid@s contra la Trata.

Areli Rojas
Activista, promotora de Derechos Humanos.

Albania González.
Activista, promotora de Derechos Humanos.

Mtra. Diana Correa.
Especialista en Trata de Personas, ITESM.

Leticia del Rocío Hernández
Abogada y escritora.